

Tu mente se basa en hechos y prefieres la autonomía y la autosuficiencia a depender de algo o alguien. Eres poco tolerante ante la indecisión y los planes que no tienen en cuenta detalles claves o que son imprácticos.
Cuando dices que vas a lograr algo, lo haces, cumples tus obligaciones y te cuesta trabajo aceptar que otros no cumplan su palabra con el mismo respeto. Es posible que encuentres más cómodo trabajar solo debido a que esto elimina la molestia de preocuparse por la fiabilidad de los demás.
La integridad es un valor muy importante para ti, las normas, las reglas y decir la verdad son fundamentales, incluso si eso tiene consecuencias para ti. Encuentras la honestidad a veces más importante que las consideraciones emocionales y eso puede producir la falsa impresión de que eres frio y que tienes dificultades para exteriorizar emociones.
Tu dedicación es una excelente cualidad y te permite lograr grandes cosas pero puede pasar que algunos se aprovechen de ti. La estabilidad y la seguridad es algo que siempre buscas y algunas veces tu pareja o compañeros de trabajo te suelen endosar responsabilidades porque saben que siempre las vas a aceptar.
Es común que todos se terminen apoyando cada vez más en ti y que eso te impida cuidarte a ti mismo como deberías. La dedicación obstinada que muestras a la estabilidad y la eficiencia crea una tensión emocional que te va cargando y solo sale a luz después de muchos años cuando ya no hay nada que hacer.
Cuando encuentras compañeros de trabajo y parejas que realmente aprecian y complementan tus cualidades, que disfrutan la luminosidad, claridad y confianza que ofreces, te darás cuenta que tu papel estabilizador es tremendamente satisfactorio.
Como amigo y compañero eres leal, confiable, honorable, quizás otros van y vuelve pero tú te quedas con tus amigos de verdad con un compromiso realmente admirable. No disfrutas el conflicto y eso lo aplicas muy bien en cómo eliges tus amigos, de tal manera que tengan principios y opiniones similares, sin embargo eso no te impide reconocer y apreciar a quienes son diferentes, estas son relaciones construidas no en la comprensión mutua, sino por respeto a sus diferencias.
Fortalezas:
-
Honesto y Directo: La integridad es el corazón de lo que eres, para ti la manipulación emocional y los juegos mentales están por fuera de la discusión, tu prefieres manejar las situaciones de forma honesta.
-
Voluntad: Te enfocas en tus objetivos y trabajas duro por ellos, eres paciente y determinado.
-
Responsable: Tu palabra es muy valiosa y se convierte generalmente en una promesa y prefieres esforzarte más allá de tus limites que incumplir. Además la lealtad que sientes por la personas y las organizaciones complementa lo anterior.
-
Tranquilo y práctico: No sueles perder los estribos o desmoronarse ante las dificultades, mantienes los pies en la tierra y tomas decisiones clara y racionales, aprovechas al máximo las cualidades individuales y en esto prevalece la eficacia sobre la empatía.
-
Crear y cumplir el orden: Para ti es importantísimo ser eficaz en lo que debes hacer y piensas que esto se logra mejor cuando todos los involucrados saben exactamente qué está sucediendo y por qué. Las pautas poco claras y las personas que infringen las reglas establecidas no los toleras. La estructura y las reglas fomentan la confiabilidad; el caos crea contratiempos imprevistos y plazos vencidos.
Debilidades:
-
Obstinado: Los hechos son los hechos. Tu personalidad dificulta que aceptes que estabas equivocado sobre algo, pero cualquiera puede perderse un detalle.
-
Insensible: Aunque no eres intencionalmente duro, a menudo hieres los sentimientos de los más sensibles por el simple mantra de que la honestidad es la mejor política. Generalmente tienes en cuenta las emociones, pero en realidad solo en lo que respecta a determinar la forma más efectiva de decir lo que hay que decir.
-
Siempre al pie de la letra: Estas convencido que las cosas funcionan mejor con reglas claramente definidas, pero esto no te hace reacio a doblegar esas reglas o probar cosas nuevas. No obstante ante un entorno totalmente desestructurado te puedes quedar paralizado.
-
A menudo te culpas irrazonablemente a ti mismo: Te cargas con trabajo y responsabilidades adicionales, rechazando buenas intenciones e ideas útiles de los demás, esto hace que tarde o temprano llegues a un punto de inflexión en el que simplemente no puedes cumplir. Dado que has acumulado la responsabilidad sobre ti mismo, crees que la responsabilidad del fracaso es solo tuya.

Tus valores demuestran que:
-
Posees fuertes estándares morales. Ser fiel a ti mismo y a tus principios le da forma a tus decisiones y demuestra cómo vives tu vida.
-
Tener relaciones estrechas significativas con los demás es importante en tu vida y es fundamental en las decisiones que tomas.
-
Demuestras consideración hacia los demás, haciendo un esfuerzo consciente para escuchar y considerar sus opiniones, y quieres sentir que esta misma cortesía se extiende hacia ti.
-
Te gusta asegurarte que la información esté bien expresada y claramente entendida.
-
Tienes el talento para pensar nuevas ideas o maneras de trabajar y disfrutas buscando materializar las mismas.
-
Valoras la libertad de autonomía y el no ser dependiente de otros.
-
Fomentar la confianza en los demás y querer que otros sientan que pueden confiar en ti son factores clave en tus interacciones.